Vacaciones con el INAH, en todo el país

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María Elena Ferral

 

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en coordinación con la Secretaría de Turismo, la Policía Federal y el Instituto Nacional de Migración, se suma al “Operativo Vacacional de Verano 2014”, vigente del 16 de julio al 17 de agosto, con el propósito de incentivar el disfrute del vasto patrimonio cultural del país.

El Museo Nacional de Antropología (MNA), que este año cumplirá 50 años de vida, fue el punto de inicio del “Operativo Vacacional de Verano 2014”, que en esta ocasión hará énfasis en el aspecto cultural del turismo, en el que participan 12 dependencias federales, 19 organismos públicos y tres privados.

Durante el banderazo de arranque de este dispositivo turístico, estuvieron presentes Carlos Joaquín González, subsecretario de Innovación y Desarrollo Turístico de la Secretaría de Turismo (Sectur), en representación de la titular de esa dependencia, Claudia Ruiz Massieu, el comisionado general de la Policía Federal, Enrique Francisco Galindo; el secretario de Turismo del Distrito Federal, Miguel Torruco Marqués, el director del Museo Nacional de Antropología (MNA), Antonio Saborit, en representación de Teresa Franco, directora general del INAH.

 

Las actividades enfocadas al público infantil también se realizarán en las representaciones del INAH, en los estados, ejemplo de ellos son los talleres de verano “Mitos mayas”, en el Museo Maya de Cancún, del 21 de julio al 2 de agosto; y el Centro INAH Campeche impartirá la actividad “¿Quiénes somos y qué hacemos?”, en el Archivo Municipal de esa ciudad, del 21 de julio al 9 de agosto.

Desde zonas arqueológicas con estructuras monumentales, hasta sitios que resguardan pinturas rupestres, murales y otros vestigios que enriquecen el conocimiento sobre las antiguas culturas que se asentaron en el país, conforman parte de la oferta cultural que el Instituto Nacional de Antropología e Historia, pone a disposición de los visitantes en el periodo vacacional de estío.

Las 187 zonas arqueológicas abiertas al público, que el INAH, tiene bajo resguardo, están dotadas de infraestructura y de los servicios necesarios para la atención de los visitantes, destacan sitios de reciente apertura como Atzompa y Bocana del Río Copalita, en Oaxaca, mientras, en Chiapas se abre paso entre la selva la ciudad maya de Palenque, hacia el sureste del país, en el estado de Quintana Roo, se encuentra la zona arqueológica de San Miguelito, así como El Meco y El Rey, localizadas en la ciudad de Cancún. En esta misma entidad, figuran las zonas de Tulum, Cobá y Xelhá, en el municipio de Solidaridad, en Yucatán, a 15 kilómetros de la ciudad de Mérida, se localiza la Zona Arqueológica de Dzibilchaltún. Asimismo, los sitios de Chichén Itzá y Uxmal, en los municipios de Tinum y Santa Elena, respectivamente, son de los que atraen mayor cantidad de visitantes. 

En la región del Bajío, un sitio abierto al público en años recientes, en el municipio de San Miguel de Allende, Guanajuato, es el de Cañada de la Virgen, que se localiza en la cuenca central del Río de la Laja en lo que fue la frontera mesoamericana, hacia el Centro de México, en la Sierra Gorda de Querétaro, se levanta el sitio de Tancama, en el municipio Jalpan de Serra, también de reciente apertura.

En el norte del país la oferta cultural es vasta. Una de estas opciones es el Museo Regional de Baja California Sur, que resguarda una extraordinaria colección que da cuenta del pasado remoto de la Baja California hasta la Revolución, por su parte, el Museo de las Misiones de Baja California presenta una colección de arte religioso, armas y herramientas de los siglos XVII y XVIII, que fueron utilizadas en las misiones españolas de Baja California.

En la parte central de la Península de Baja California, se localiza la Zona Arqueológica de la Sierra de San Francisco, que preserva un conjunto de pinturas rupestres pertenecientes al estilo Gran Mural, ubicado dentro de las cuevas de este sitio único del estado y que cuenta con la declaratoria de Patrimonio Mundial, conocido como el Museo del Obispado, el Museo Regional de Nuevo León, es el edificio más antiguo de Monterrey y está dedicado al fomento de la historia y la cultura de la región noreste del país y su importancia en el devenir de México, en esa misma entidad se encuentra la Zona Arqueológica Boca de Potrerillos, que fue un lugar estratégico para la residencia estacional de grupos de cazadores recolectores hace ocho mil años. Su principal atractivo turístico, son los más de 12 mil petroglifos que lo convierten en verdadera zona monumental del norte de México.

Mientras que en el estado de Chihuahua, el Museo de las Culturas del Norte alberga una de las más bellas colecciones arqueológicas del México antiguo recuperada durante las excavaciones arqueológicas de Paquimé y de otros importantes sitios arqueológicos de la región conocida como la Gran Chichimeca, en la Zona Arqueológica Paquimé, declarada por la UNESCO como Patrimonio Mundial, se aprecia el testimonio excepcional de la relación entre los pueblos del Norte de México y Mesoamérica, y ofrece evidencia única de la construcción con tierra y ensambles arquitectónicos.

Finalmente, en Sonora, el edificio histórico de la Antigua Penitenciaría, donde se realizó el último fusilamiento en México, en 1957, alberga el Museo Regional, recinto que narra la historia del estado y su sociedad.