Concluye demolición de Génova 33
AGENCIA
Tras 120 días de trabajo y mediante un método manual, que consistió en trabajar a pico y pala, 30 trabajadores, concluyeron con éxito la demolición del edificio ubicado en Génova 33, en la Colonia Juárez, uno de los edificios dañados por el sismo del 19 de septiembre más grandes por demoler lo que representaba mayor riesgo debido a que por esta zona diariamente caminan miles de visitantes.
Al concluir los trabajos, la calle de Estrasburgo (que conecta Génova con Amberes) ya fue reabierta a la circulación en su totalidad, informó la Sobse. Los trabajadores demolieron primero retiraron los espacios de azoteas y sucesivamente los pisos más altos hasta llegar a los niveles más bajos.
Los trabajadores que demolieron la edificación, primero fueron retiraron los espacios de azoteas y sucesivamente los pisos más altos hasta llegar a los niveles más bajos. Para estas labores se utilizaron picos, mazos, palas, carretillas y equipos de corte de concreto y de acero. Con la ayuda de una máquina retroexcavadora se demolieron trabes de los dos primeros pisos, las cuales ya habían sido seccionadas a través de la técnica de oxicorte.
Durante el sismo del 19 de septiembre, el edificio de 50 metros de altura tuvo un colapso parcial en el cuarto de máquinas y cubo de elevadores ubicados en la azotea. También sufrió daños en elementos estructurales como trabes y columnas.
El Encargado de la Secretaria de Obras y Servicios, Gerardo Báez Pineda, destacó la complejidad para la demolición del inmueble, debido a que se encontraba en una de las zonas con mayor concentración turística y comercial de la Ciudad de México.
“Con el retiro de este inmueble mitigamos el riesgo que existía en la calle de Génova, por donde diario caminan miles de visitantes. Era una de los edificios más grandes por demoler, lo que representaba mayor riesgo. Los trabajos se realizaron de forma manual, con picos, mazos y palas, para garantizar la seguridad de peatones, inmuebles colindantes y establecimientos comerciales de la Zona Rosa”, indicó.
Debido a la emergencia, a la altura del edificio y a su ubicación, la Sobse tomó diversas medidas de seguridad antes de iniciar los trabajos.
En torno a la zona de demolición se colocó un tapial de madera y el edificio fue cubierto con una malla sombra para evitar la caída de escombro. Fuera de la zona de trabajos se habilitó un paso peatonal techado con madera, a fin de garantizar la seguridad de los transeúntes de la calle Génova.
Los primeros trabajos consistieron en el retiro de equipamiento y pertenencias importantes de los 28 despachos y tres locales comerciales que tenía el inmueble. Posteriormente, se brindó información a locatarios y vecinos sobre el proceso de demolición.