Tasa de homicidios justifican muro: Trump

el

AGENCIA

Donald Trump señaló el martes que la tasa de homicidio en México justifica aún más la necesidad de construir su muro fronterizo, mientras que en el Senado funcionarios de su gobierno justificaron la política de separación de niños ignorando más revelaciones sobre los abusos que sufrieron los menores de edad.

Trump tuiteó que “una de las razones por la que necesitamos Gran Seguridad Fronteriza es que la tasa de asesinatos de México en 2017 se incrementó en 27% a 31 mil 174 personas… ¡un récord!”. Esto aparentemente después de ver las cifras en su favorito canal, Fox News.

Trump reiteró que -contra los deseos de los líderes republicanos en el Congreso- está dispuesto a “cerrar” el gobierno si el Congreso rehúsa financiar el muro (ya no ha mencionado que México lo pagará) pues “la seguridad fronteriza es seguridad nacional”.

Mientras, altos funcionarios del gobierno de Trump defendieron la política de separación de familias, condenada universalmente. En una audiencia sobre el tema ante el Comité Judicial del Senado, Matthew Albence del servicio de inmigración (ICE), aseguró que las condiciones en los centros de detención familiares son semejantes a “campamentos de verano”, con todo tipo de actividades recreativas y atención a la salud.

Al senador se le preguntó si estaría dispuesto dejaría a su propio hijo en esos centros, Albence respondió: “Creo que no estamos sobre el punto…. estos individuos están ahí porque han violado una ley”.

Los funcionarios fueron cuestionados por el manejo caótico que hicieron primero las separaciones y después la reunificación de las familias ordenada por un juez federal. Unos 711 niños de los más de 2 mil 500 que fueron separados desde mayo aún están bajo custodia federal; 431 de ellos porque el gobierno deportó a sus padres.

El senador Dick Durbin, segundo en rango de la bancada demócrata, declaró que “alguien en el gobierno necesita asumir la responsabilidad”, y “a nombre de los 711 niños perdidos… y la decencia común” exigió la renuncia “de la arquitecta de este desastre humanitario”, la secretaria de Seguridad Interna, Kirstjen Nielsen.

Más sorprendente fue la voz disonante del comandante Jonathan White del Servicio de Salud Pública de Estados Unidos - un funcionario de carrera que ha trabajado bajo varias presidencias - quien declaró que “no hay duda de que la separación de niños de sus padres implica un potencial significativo para un daño sicológico traumático al niño”.