Querétaro ya tiene dueño

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Miguel Ángel Sánchez se presentó como parte del grupo de inversionistas que adquirieron el pasado ocho de abril al Club Querétaro. Sin embargo, ante los medios de comunicación presentó como único comprobante un papel firmado por la esposa de Amado Yáñez, Verónica González, quien era la verdadera propietaria del club Querétaro ante la ley mexicana.

 

Sánchez señaló que hasta el momento las negociaciones siguen en curso con el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes, pues aseguró que ellos no se harán cargo de los adeudos que tiene la anterior administración con los jugadores y con los directivos, a los cuales se les adeuda dos meses de sueldo.

"La señora de Yáñez es la apoderada ante las autoridades. No he tenido contacto con Federación, porque primero negocié con los dueños. El cuaderno de cargos se presenta hoy. Cumplimos, no ha habido ningún revés y por eso tenemos la oportunidad de presentar el cuaderno de cargos", agregó; no quiso revelar los nombres de los otros tres inversionistas, a los que solamente calificó como "gente preparada que estudió en prestigiosas universidades de México".

Además de señalar que "como cualquier negociación, eso en conjunto con las autoridades se verá. Yo compro un equipo con ciertas características y en una situación contractual, pero libre de cualquier adeudo salarial, administrativo y de cualquier situación. Yo compro una franquicia con activos. Eso lo tiene que manejar la parte vendedora", expuso.

Por su parte, Luis Antonio Ramírez, abogado de los inversionistas y quien se hace cargo de la parte jurídica, expresó que "en la venta con SAE se tuvo acercamiento con ellos al igual que con otros grupos. Esta operación fue con el dueño y la situación jurídica se conocía. Lo que se está a la espera es el visto bueno de la federación. Estamos esperando. Requerimos el visto bueno de la Federación. Tenemos el visto bueno platicado, pero hasta que no se llegue a la Federación no se podrá hacer realidad", dijo.

 

Además de añadir que "el equipo sigue asegurado. Se han tenido esas pláticas con la procuraduría, porque el nuevo comprador debe saber la situación que tiene. Dándose las condiciones es como el gobierno termina dando el visto bueno. El contrato ya está firmado y ellos tienen una copia en la Federación".