Triste empate
Después de 12 encuentros, llegó "el arroz negro" a la Copa Mundial. Irán y Nigeria arrojaron ayer lunes el primer empate y el primer partido sin goles en la Copa Mundial Brasil 2014. El encuentro, realizado en el Estadio Arena da Baixada, ha sido quizá el de más escasa calidad, pues ambas escuadras desentonaron con una igualada que los situó como sublíderes del Grupo F, que encabeza Argentina con tres unidades.
Las Águilas Verdes dominaron el encuentro, pero carecieron de ingenio de tres cuartos de cancha hacia adelante. Irán tampoco ofreció una evolución en su futbol respecto a su anterior participación en Mundiales y apeló a su astro Reza Ghoochannejhad, quien tuvo la posibilidad más cercana de anotar al minuto, pero su remate de cabeza fue detenido por el arquero Vincent Enyeama.
Las principales figuras de Nigeria, John Obi Mikel, Víctor Moses, pasaron inadvertidos y sus aportaciones fueron fugaces. Nigeria arremetió sobre el arco iraní en los últimos minutos. Mikel mandó un pase, pero Odemwingie controló con la mano en el área y el árbitro ecuatoriano Carlos Vera estaba atento a la acción y marcó la infracción.
Dirigido por el portugués Carlos Queiroz, Irán aguantó a los nigerianos replegado en su territorio y destruyó cada avance de sus adversarios. La mayoría de los 38 mil aficionados que asistieron al juego despidieron con un sonoro abucheo a ambas escuadras.
Nigeria ligó su noveno partido sin ganar en Copa del Mundo e Irán sumó cinco. El siguiente encuentro de Irán será ante Argentina el sábado y ese mismo día Nigeria enfrentará a Bosnia y Herzegovina.