Se desata un conflicto en primaria de Plan de Ayala
Con el inicio del periodo escolar amontonaron a 18 menores en la dirección como si fuera salón de clases
Por Adrián Mendoza Salazar
Tihuatlán
Con el inicio del nuevo periodo escolar 2014- 2015, ayer se registró un conflicto en la escuela primaria Narciso Mendoza, de Plan de Ayala, en donde padres de familia de 18 menores que cursan el 6° grado se inconformaron porque sus hijos fueron arrumbados a la dirección escolar, lugar totalmente incómodo para ellos.
Silvia Gutiérrez Rangel, Cristina Guzmán Ochoa, entre otros, manifestaron su rechazo contra el director Guadalupe Aguirre Ramos, quien no dio explicaciones del cambio, pero si la insinuación de que hagan lo quieran por que el está acostumbrado a los señalamientos y demandas.
Indicaron que en el plantel educativo se dio cabida a más alumnos de primer grado y ante esa saturación el salón que debieran ocupar sus hijos se lo cambiaron en la dirección, lugar donde los mismos menores señalan que no se puede caminar y que para hacerlo se tropiezan con todo.
Ante ello ayer por la mañana acudieron con el alcalde Gregorio Gómez para solicitar su apoyo, a lo que el munícipe destacó que se habrá de investigar este caso y al mismo tiempo si existe aprobación de la Secretaria de Educación Pública o del Estado de Veracruz para posteriormente aplicar las medidas necesarias de solución.
Por su parte el profesor del grupo identificado como Austreberto Muñoz, quien es señalado por los padres de familia de obtener el grupo tras el favor otorgado por el director, señaló que el acudió a dar su clase y que además de ser maestro de educación física es titulado en educación, lo que esta apto para impartir clases, atribuyendo a la vez que el lugar asignado reúne todas las condiciones.
Sin embargo finalmente la mayoría de los alumnos del sexto grado lo contradijeron debido que señalaron el área es incomoda, es pequeña, en donde nadie se puede ni mover y lo que es peor, el maestro les dijo que ya no dijeran nada del lugar con la intensión de tomar represalias a quien hable, aspecto que nadie obedeció.