Autoridades no cumplen con su trabajo

María Elena Ferral

Papantla

En un “cero a la izquierda”, esta convertido el regidor priista, comisionado en limpia pública, el profesor José Alfredo García Cruz, el cual tiene abandonada su comisión y ni siquiera se presenta a trabajar al ayuntamiento, por lo que la ciudad se encuentra llena de basura y los reclamos y protestas de los ciudadanos no se han hecho esperar, conductores también se quejan de las “zanjas” en las calles y de las fugas de agua por toda la ciudad.

Ante el nulo trabajo del regidor comisionado en limpia pública, el cual delega sus responsabilidades en su hermano Esteban García Cruz, que junto con la veintena de “auxiliares” que tiene cobrando en la nómina del ayuntamiento, le cuidan el changarro, mientras el regidor atiende asuntos personales y propios de su trabajo en el magisterio, por lo que los ciudadanos le piden que renuncie al cargo, pues lleva meses sin trabajar, solo cobrando sus casi cien mil pesos al mes, de lo contrario, le van a llevar las toneladas de basura que hay en las calles, a su casa.

Otro problema que afecta a los ciudadanos, son las fugas de agua que hay por toda la ciudad, por lo que la Comisión de Agua del Estado de Veracruz, no se da abasto para atenderla y de esa manera evitar que miles de litros del vital líquido se desperdicien, dicho problema se viene manifestando desde hace varios años, pues las fugas de agua ocurren a diario en distintas calles y estas ya están detectadas, aunque también cabe destacar la irresponsabilidad de algunos usuarios, pues algunas fugas ocurren en sus tomas, como ocurre en la privada de Moctezuma, en donde vecinos reportan una fuga, desde hace mes.

Gregorio Jiménez García, líder de taxistas de esta ciudad, se quejó de la “trampa mortal”, que se ubica sobre la calle Heroico Colegio Militar, frente al Rastro Municipal, en donde una rejilla averiada por el paso del tiempo, lleva más de un mes “volando” y eso puede provocar un accidente automovilístico en cualquier momento, de igual forma se quejó de las “zanjas”  que personas irresponsables i inconscientes, dejan abiertas o rellenan con tierra, como la que está sobre la calle Aquiles Serdán, a unos pasos del mercado, en pleno centro histórico.