Usurpan funciones en la Delegación de Tránsito
María Elena Ferral
Las “huestes” de Carlos Vargas Valencia, quien sigue siendo el delegado de Tránsito del Estado, a pesar del “permiso” de dos meses del que goza, para coordinar la campaña de la candidata del PRI a la Diputación federal, Heidi Salazar Espinosa, tienen convertida a la Delegación local en un verdadero “atracadero”, en donde particulares ´despachan´, solapados por el director de la DGTTE, Edmundo Martínez Zaleta.
A pesar de tener conocimiento de las graves irregularidades que imperan en el interior de la Delegación de Tránsito del Estado, el director estatal, Edmundo Martínez Zaleta, lo permite, pues se hace de la vista gorda, para que la nefasta herencia que tiene en la dependencia Carlos Vargas Valencia, siendo éstas, dos personas totalmente ajenas a la DGTTE, “abogados” xalapeños que han aterrizado en la Delegación de esta ciudad, César Cruz Jiménez y su “hijo”, Manuel Quiñones, usurpan funciones en dicha oficina, así como una “asistente” de la secretaria de nombre Teresa Martínez.
Concesionarios del servicio de transporte público y conductores particulares, piden la intervención del secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, a fin de que tome cartas en el asunto y se ordene una investigación del porqué personas ajenas a la Dirección General de Tránsito del Estado, usurpan funciones tanto administrativas, como operativas, en la Delegación de Tránsito del Estado en Papantla, utilizando incluso las patrullas oficiales y que éstos sean retirados de la dependencia, a la cual se dice, han tomado por asalto, atracando a diestra y siniestra a cuanto conductor caeen sus manos.
Un negocio redondo que solo deja beneficios económicos al delegado de Tránsito con licencia, Carlos Vargas Valencia, quien a través de los “abogados” xalapeños César Cruz Jiménez y Manuel Quiñones y de la propia secretaria, Isabel Berenice Romero Castañeda, es el que se observa en la dependencia en donde un “borrachazo”, o conducir en estado de ebriedad tiene una mordida de diez mil pesos en adelante, lo mismo que los accidentes o el cobro de “cuotas” a las compañías que operan en este municipio, mientras la vialidad en la ciudad está “de cabeza”, pues han vendido la vía pública, cobrando por ello fuertes cantidades mensuales.
Es tanto el control de la secretaria de Tránsito, mejor conocida como “Chabelita”, que se da el lujo de tener una “asistente”, de nombre Teresa Martínez, que es la se encarga de hacer “guardias” en la Delegación, contestar el teléfono y hasta ir a Xalapa a realizar “trámites” a la propia DGTTE, en donde de igual forma, funcionarios corruptos, con la clásica mochada toleran este tipo de irregularidades, pues es tanto el control y poder que ejerce Carlos Vargas Valencia, que le apuesta a ganar la elección del PRI, para seguir otros seis en el cargo.
Carlos Vargas Valencia pretende cambiar de “madrina”, pues ya se le acabó el fuero a su patrona, Alma Jeanny Arroyo Ruiz y ahora pretende cobijarse políticamente con Heidi Salazar, para seguir haciendo de las suyas en la Delegación de Tránsito del Estado, en donde el actual “Delegado”, Santiago Viveros Córdoba, es un “cero a la izquierda” y se conforma con las migajas que le avientan los “esbirros” de Vargas Valencia, quienes usurpan funciones de Peritos, Jefes de Servicios, Oficiales de Tránsito y hasta de “Delegados”, solapados por el director, Edmundo Martínez Zaleta.