Marcos Romero, represor
-Juan Carlos Domínguez, arremete contra boleros
Por María Elena Ferral
Trabajadores que se ganan la vida boleando calzado en el parque central “Israel C. Téllez”, son reprimidos por el alcalde perredista Marcos Romero Sánchez, el cual montó en cólera al percatarse del cambio de color de los “carritos” que utilizan los betuneros y de inmediato le ordenó al recién nombrado director de Turismo Municipal, Juan Carlos Domínguez Morales, que los cambie de color, poniendo como pretexto la “normatividad” de Pueblos Mágicos.
Al alcalde perredista, Marcos Romero Sánchez, lo que menos le importa es, precisamente, la normatividad de Pueblos Mágicos, como tampoco poner en riesgo la certificación de Papantla, como tal, de lo contrario, no permitiera la instalación permanente del gigantesco tianguis de los vendedores de artesanías, encabezados por Adriana Aparicio Gaya y Xóchitl López Castillo, sobre la calle Gutiérrez Zamora, a un costado del parque “Israel C. Téllez”, y que son operadoras de su sobrino Mariano Romero González.
Tampoco le importa tener “atascado” de vendedores ambulantes, locales y foráneos en el centro histórico, pasándose por el “arco del triunfo” al presidente del Comité de Pueblos Mágicos, Arturo Solares Rivera, el cual no es tomado en cuenta en los trabajos que realiza, destrozando calles, utilizando el pretexto de Pueblo Mágico, pero sí le molestó que los boleros del parque, pintaran sus “carritos” de color verde, tras una gestión que realizaron, precisamente, porque el alcalde les negó el apoyo para pintarlos.
Lo más lamentable, es que el flamante director de Turismo Municipal, Juan Carlos Domínguez Morales, se preste al juego y acate las órdenes del “Virrey”, Marcos Romero Sánchez, al que lo único que le interesa es imponer su “Ley” teniendo la complicidad de los regidores perredistas Norma Jovita García García, Rodolfo Pérez Maya y Héctor Gutiérrez Martín; el panista Héctor Armando Guevara Guzmán y los traidores del Movimiento Ciudadano, Fátima Ramos Martínez, Argelia Carolina Ortega Zepeta y Francisco Javier Serna Mendoza.