Cesan a subdirector de “El Tajín”
-Tras “levantón” a estudiante de la UNAM
Por María Elena Ferral
Tras el intento de secuestro de un estudiante de la carrera de Geo Historia, de la Universidad Autónoma de México, campus Morelia-Michoacán, en el interior de la Zona Arqueológica El Tajín, quien realizaba un recorrido de práctica en la residencia del Dios del trueno, junto con dos compañeras que formaban parte de un grupo de alumnos, el pasado 25 de abril, el Instituto Nacional de Antropología e Historia, determinó el cese del subdirector de este centro ceremonial totonaco, Jesús Trejo Díaz, y en su lugar se designó a el maestro Olaf Jaime Riverón.
Es de señalar que tras los lamentables hechos ocurridos alrededor de las 14:30 horas del día señalado, que pusieron en riesgo la vida del alumno de la UNAM, Francisco Gómez López, el cual fue levantado en el interior de la zona arqueológica, siendo localizado dos horas después en las inmediaciones del lugar y que según el informe de la Policía Militar, se trató de “un secuestro, el joven fue abandonado en el monte y le robaron, únicamente, su celular y 500 pesos”, el exsubdirector Jesús Trejo Díaz, fue retirado de su cargo en este centro ceremonial totonaca a partir del pasado uno de mayo, contribuyendo la presión ejercida por los trabajadores del INAH.
Del mismo modo, el Instituto designó a Roberto Lozano Sosa, como nuevo administrador de esta maravillosa ciudad antigua, por lo que ambos asumieron el control del sitio este fin de semana y enseguida se reunieron con los trabajadores de esta zona arqueológica para escuchar las necesidades y conocer la problemática que persiste en este lugar, el cual es uno de los más visitados de toda la República Mexicana y en donde impera un completo desorden, debido al bloqueo del único acceso a este lugar, así como del estacionamiento y áreas verdes por cientos de ambulantes, que además de generar una imagen negativa, obstruyen la circulación de las unidades ante una emergencia como la que se presentó.
Durante un primer acercamiento entre los nuevos encargados de la zona arqueológica El Tajín y los trabajadores del INAH, se expusieron las necesidades que no han permitido el desarrollo de esta zona arqueológica, en donde los custodios continúan demandando el incremento en el número de plazas.