El obispo José Trinidad Zapata celebrará confirmaciones

“Esto implica una preparación, no solo de quien va a recibir el Sacramento, sino de toda la familia y la misma comunidad se va comprometiendo más a entender que no somos cristianos de nombre, ni católicos a medias, sino que tenemos que vivir nuestro compromiso”

Berenice Cárdenas

Papantla

Luego de encabezar la celebración del Sacramento de la Confirmación de las comunidades que pertenecen a la Parroquia de Nuestra Señora de La Asunción en esta ciudad, el obispo Rafael Palma Capetillo, señaló “he sido enviado a nombre del obispo, José Trinidad Zapata Ortiz, a encabezar esta celebración religiosa y Dios mediante hoy viernes estará aquí el nuevo obispo, celebrando más confirmaciones”.

Palma Capetillo, destacó que “debido a la celebración que se realizó este 11 de junio, donde le dieron la bienvenida, el VIII obispo de la Diócesis de Papantla, José Trinidad Zapata Ortiz, no pudo venir pues se quedó a despedir a sus familiares y sacerdotes que se trasladaron desde San Andrés Tuxtla y a algunos amigos muy cercanos, por lo que me pidió que fuera yo, el encargado de acompañar a las comunidades que hoy reciben el Sacramento de la Confirmación”.

Añadiendo que “fueron un poco más de 400 personas, las que ayer jueves recibieron este Sacramento de la Confirmación y hoy viernes será un número similar, la única diferencia es que en la Casa de la Iglesia, se reunieron varias comunidades de Papantla y en la Parroquia de Nuestra Señora de La Asunción, serán de la cabecera municipal, las cuales se desarrollarán en dos horarios, las primeras a las 16:00 horas y las otras a las 19:00 horas”.

Destacando que “el Sacramento es muy importante, dado que tiene un signo imborrable de recibir una fuerza especial del Espíritu Santo, no se repite, pues solo se recibe una vez, mas su efecto es importante porque dura toda la vida, a este Sacramento se le llama también de la -madurez cristiana-, con él se adquiere un compromiso mayor, nos enseña a orar guiados por el Espíritu Santo, nos enseña a amar y a servir también, movidos por la acción de la gracia y el amor”.

Desde luego, abundó, “estamos contentos de que sea un número tan grande de personas, porque esto implica una preparación, no solo de quien va a recibir el Sacramento, sino de toda la familia y la misma comunidad se va comprometiendo más a entender que no somos cristianos de nombre, ni católicos a medias, sino que tenemos que vivir nuestro compromiso y mientras mejor nos formemos, más podemos servir y vivir para defender la fe, la verdad, el amor a Cristo y dar testimonio ante los demás”.

Resaltando que “aquí los padres tienen un compromiso primordial, porque son los que deben de transmitir la fe y deben dar ejemplo, los padrinos son un apoyo para la labor de los padres, aunque estén y aún más cuando llegan a faltar, para que sean parte de esto, lo importante a la hora de recibir un Sacramento, es prepararnos espiritualmente y con la doctrina, pero al mismo tiempo, darnos cuenta que toda celebración que se hace en la Iglesia dentro de la comunidad en el nombre de Cristo, tendrá un sentido de pedir humildemente la ayuda de Dios”.