Toman clases en obra negra

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-Estudiantes del jardín de niños Citlali están en riesgo, pese que plantel está junto a Supervisión Escolar

-Secretaria de Educación no ha hecho nada por atender el problema

Por Juan David Castilla Arcos

Estudiantes del jardín de niños Citlali cursan sus clases en un salón que está en obra negra y han sido víctimas de la delincuencia. La escuela está junto a la Supervisión Escolar de la Zona 86 de la SEV y, pese a ello, están en riesgo.

Los padres de familia han solicitado la intervención de las autoridades educativas para que sea atendido el problema y, ante la nula respuesta, tomaron las instalaciones, tanto de la escuela como de la supervisión.

Los 18 menores que llevan a cabo sus actividades académicas en el aula que presenta un avance de 50 por ciento en su construcción han padecido enfermedades respiratorias. Otros 15 están en el único salón con el que cuenta la institución y donde también se encuentra la dirección.

Hace dos años, el Instituto de Espacios Educativos, que depende de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), abandonó los trabajos. Ahora, más de la mitad de los alumnos están "casi a la intemperie".

De acuerdo con la representante de los inconformes, María Eugenia Cárcamo Castillo, la titular de la SEV, Xóchitl Adela Osorio Martínez, está enterada de la problemática; sin embargo, nada ha hecho para atender el problema.

"Espacios Educativos hizo un compromiso de hacernos un aula, hace dos años, porque la escuela está muy pequeña. En este espacio está la dirección, el primer año y el segundo año; no los divide una cortina, no los divide nada porque el espacio es muy pequeño".

El edificio está ubicado en la calle Osa Menor, de la colonia Arroyo Blanco, una zona conflictiva de la capital del estado en materia de seguridad.

"Hay muchas cosas qué reclamarle al Gobierno. También el alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, se ha comprometido a mejorar la escuela, pero seguimos esperando", añadió la entrevistada. 

La supervisora escolar Eva Berenice Bello Benavides minimizó el problema y de manera prepotente exigió a los reporteros que no la videograbaran.