Preservan tortuga marina en Veracruz

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-Cada año, llegan a territorio veracruzano, cinco de las ocho especies que hay en el mundo

DE LA REDACCIÓN

En el 2015, el Centro Veracruzano de Investigación y Conservación de la Tortuga Marina “Marcelino Yépez”, en Nautla Veracruz, registró la cifra récord de 7 mil 480 nidos protegidos, y liberó más de 770 mil crías de tortuga en sus 17 kilómetros de playa.

Y es que a pesar de habitar desde hace más de cien millones de años en el planeta, la  tortuga marina es hoy una especie en peligro de extinción debido tanto a sus depredadores naturales o a las acciones del ser humano. Una de cada mil tortugas que llegan a playa, logra vivir hasta su etapa adulta; por ello la importancia de su protección.

De las ocho variedades de tortugas marinas identificadas en el mundo, siete de ellas anidan en costas mexicanas y de esas, cinco especies llegan a playas veracruzanas por la riqueza de su orografía: La Lora (Lepidochelys kempii), la Verde (Chelonia mydas), la Carey (Eretmochelys  imbricata), la Caguama (Caretta caretta) y la Laúd (Dermochelys coriácea).

Desde hace 40 años la gente de la localidad de Raudal de las Flores, Nautla,  comenzaron con los trabajos de protección de la tortuga marina, y hace más de 20 años, cuentan con el apoyo de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) del Gobierno de Veracruz para crear lo que hoy es el campamento tortuguero “Marcelino Yépez”.

“De lo que era un proyecto empírico, le hemos dado una base científica y se ha notado el incremento en las poblaciones. Cada vez son más las tortugas que anidan cada año desde el río Raudal en Nautla, hasta la desembocadura del río Colipa en Vega de Alatorre que es lo que comprende este campamento”, informó la Técnico Ambiental de la Dirección de Recursos Naturales de la Sedema, Martha Primo Castro.

Y es que en este mismo campamento tortuguero, en el 2008 se registraron de tres a cuatro mil nidos; en el 2012, seis mil 635 y el año pasado se llegó a la cifra de siete mil 480.

En general, se asocia la anidación de la tortuga con lo que es primavera y verano, la temporada de calor, porque vienen por las corrientes cálidas del Golfo, en promedio, para todo el estado, empiezan a partir de marzo a llegar las primeras tortugas. La Lora, conocida como la tortuga diurna, de las cinco especies, es la que anida de día, esa es la que empieza a aperturar la anidación en los meses de marzo, abril y termina hasta octubre.

“El Centro veracruzano comienza a trabajar desde marzo, vigilando la playa y confirmando si hay rastro de que ya se aproximen las tortugas, pero en promedio, hemos visto que es a finales de marzo o principios de abril cuando inicia la anidación. Termina la anidación hasta octubre, sin embargo, la incubación de los huevos tiene un periodo de de 45 a 60 días, entonces, para nosotros, la jornada de trabajo  finaliza en diciembre”.

Como parte de las actividades y lineamientos del campamento tortuguero se fomenta la educación ambiental: todo el año se dan pláticas enfatizadas a cada persona que visite estas playas sobre las tortugas y sus cuidados; se promueve la investigación: buscan el acercamiento de instituciones académicas para realizar proyectos sobre el cuidado del hábitat de la tortuga y se capacita; y se realizan las limpiezas de las playas: se programan jornadas para que cuando las tortugas salgan, encuentren la playa lo más natural posible y la basura no se convierta en alimento y las dañe.

“En el campamento atienden cuatro personas de fijo, todos los demás son voluntarios. Se ha hecho aquí una gran labor, los niños de las comunidades, por ejemplo, van solitos y ayudan desde lo que es la limpieza de la playa, hasta en el cuidado de las tortugas”, expresó la representante de la Sedema.

Así como este, existen en el territorio veracruzano 18 campamentos tortugueros enfocados al cuidado de las hembras, de los nidos y el nacimiento de las crías, ellos son manejados por particulares, asociaciones civiles o incluso, por grupos comunitarios; pero ocasionalmente, reciben apoyo de la Sedema.

“Ocasionalmente hay reuniones de trabajo donde podemos intercambiar experiencias y con base a las necesidades, se procura ayudarnos técnicamente y compartir el cómo poder mejorar el manejo en playa, tanto de los organismos como del hábitat o en su caso, también capacitaciones”.

También la naturaleza juega su rol en la vida de estas especies marinas, las corrientes, la temperatura del mar, todo eso influye en que las tortugas lleguen más o menos a las costas. 

Es sabido que Veracruz cuenta con la riqueza biológica para recibir a las tortugas, pero es importante que la sociedad tome conciencia del riesgo que existe sobre la desaparición de esta especie, por ello, hay que aprender a convivir en equilibrio con nuestro ambiente.