Colapso por bloqueo transportista
-Más de 2 mil taxis y 600 urbanos en paro desquiciaron la vida en la ciudad; la actividad económica se vino abajo ante la falta de conectividad y bloqueos viales
Por Elizabeth Balderas
Pese a que los transportistas habían anunciado que las movilizaciones de este jueves serían pacíficas, algunos presuntos taxistas y urbaneros radicalizaron las acciones llevadas a cabo para exigir una disminución en los precios del combustible.
Tan solo en este puerto, unas 2 mil taxis y 600 urbanos no prestaron el servicio y así permanecieron por varias horas.
Los transportistas se plantaron en las principales avenidas de la ciudad como Ignacio Zaragoza y Venustiano Carranza del centro.
Por su parte, Mario Clairgue Viveros, dirigente de la UGOCM, afirmó que esto se trató de una movilización pacífica y descartó la participación de transportistas adheridos a la organización que representa, en las protestas que se han registrado en centros comerciales y gasolineras.
“Vemos mucha responsabilidad, hay un control total y lo que queremos es que el gobernador escuche a los dirigentes y que sea el enlace con el gobierno federal para que dé una solución favorable con el alto costo del combustible", afirmó.
Más de 600 urbanos fueron los que detuvieron sus operaciones durante este día.
En tanto que los taxistas que también participaron, sumaron 2 mil unidades que apagaron el motor para no prestar el servicio.
Ricardo López Carrera, presidente de la Coalición de organizaciones independientes de transporte público del estado de Veracruz, señaló que no emprenderán acciones que vulneren a la sociedad.
“No va a haber tomas de gasolineras, esto es de forma pacífica para hacernos sentir, para que el gobierno federal dé marcha atrás a este aumento de la gasolina que está afectando a todo el ciudadano de México", dijo.
Expuso que se retirarán en punto de las 6 de la mañana de este viernes 6 de enero reiniciando actividades de manera normal, sin embargo de no tener una respuesta por parte de las autoridades estatales o federales, continuarán con este tipo de manifestaciones que estiman radicalizar de no ser atendidos.
Cabe mencionar que a pesar de lo dicho, se pudo ver a taxistas y urbaneros vandalizando en las calles.
Los compañeros que sí estaban dando el servicio a la ciudadanía eran obligados a bajarlos y amenazados.
Además a otros les pedían dinero a cambio de permitirles la libre circulación por la ciudad.


