En 102 comunidades 2,600 Pisos Firmes este año: Alcalde

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Ricardo Serna Barajas expresó que cuando termine su gobierno no habrá casas sin piso firme

Doña Josefa Morales Hernández vio llegar a la cuadrilla de trabajadores a su casa, supo que finalmente su dormitorio tendría piso firme en lugar de tierra. Oriunda del Salto, Doña Josefa junto con su madre es una de las tantas beneficiadas. Se trata de un programa municipal que previamente ha realizado un censo y ha establecido las necesidades de la gente, privilegiando a quienes menos tienen.

El Salto Viejo y el Salto Nuevo tienen un paradisiaco paisaje y una cascada con aguas multicolores y es, sin embargo, una comunidad pobre y lejana. Por instrucciones del alcalde, Ricardo Serna Barajas, hasta allá llegaron los encuestadores para cerciorarse de la pobreza de quienes ahora reciben este beneficio.

El Presidente Municipal dio instrucciones precisas para que se hiciera un censo en 102 comunidades y se determinara qué familias se encontraban en los umbrales de la pobreza. Se trata de dos mil 600 pisos en total tan solo en 2014, ya que Ricardo Serna tiene previsto resolver el problema de los pisos de tierra en el municipio, en los cuatro años de su gobierno.

 

En cada comunidad se forma una cuadrilla de trabajadores advierte don Lorenzo Bautista y dice que él es el encargado de echar los pisos en El Salto Nuevo y en el Salto Viejo, dos comunidades apenas divididas por unos cientos de metros. Indica que a cada familia en promedio se le construye 40 metros cuadrados y que el espesor es de ocho centímetros.

El beneficio en una comunidad se da en dos direcciones, ya que los trabajadores de la cuadrilla son por lo regular oriundos de la comunidad y eso trae consigo una derrama económica en el lugar donde se instala el “Piso Firme”. Lorenzo Bautista estima que se construyen dos pisos firmes en un día.

 

El presidente del Patronato de “Pisos Firmes”, Mario Morales Hernández, comenta que todos están muy contentos, pero sobre todo las mujeres. Lo mejor de todo es que el piso no nos cuesta ni un centavo, nos dice visiblemente satisfecho. Relata que cuando llegaron los del gobierno municipal para avisar que venían los “Pisos Firmes”, rápido se  pusieron  a sacar las cosas y aplanaron  la tierra lo más que pudieron y ahora ya tienen su “Piso Firme”.