Gobernador niega discurso de odio, pero insiste en la existencia de falsas feministas
YHADIRA PAREDES
XALAPA
El gobernador Cuitláhuac García Jiménez rechazó que haya emitido un discurso de odio en contra de las integrantes de la Asociación Civil Equifonía, como ellas lo denunciaron, al asegurar que hay “falsas feministas” que no se pronuncian en casos como el de Rogelio “N”, ex secretario de gobierno.
Cuestionado en torno a cuáles son esas falsas feministas respondió “estas politólogas que aspiran a cargos públicos y con tal de atraer medios y claro sobre todo en contra nuestra, diciendo el `Gobierno Feminicida’, y cuando nosotros señalamos y damos con un feminicida y lo ponemos en la cárcel, entonces dicen, `ah no es revanchismo político’, es el caso de Rogelio N”.
“No veo donde está el discurso de odio, por Dios, como va a ser un discurso de odio si lo que estamos haciendo es que se hablen del tema de los jueces que protegen a feminicidas. Yo respeto mucho su opinión, pero debemos de hacer equipos en denunciar a los jueces que andan liberando a feminicidas, golpeadores de mujeres”.
Aseguró que en el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares no vio a Equifonía hablar de Rogelio Franco, pero sí vio a las “verdaderas feministas” que dijeron basta de agredir a las mujeres y mencionaron el nombre del encargado de la política interna de Veracruz.
Retomó también el caso del regidor del Puerto de Veracruz, Sebastián Cano, acusado de presuntos delitos de abuso sexual y violencia de género, con denuncias ante la FGE, en donde dijo las organizaciones aliadas del gobierno anterior hicieron manifiestos públicos.
“Me disculpo si se entiendo como mensaje de odio, pero vuelvo a insistimos hagamos equipo contra los jueces que andan liberando feminicidas, estamos poniendo ante la ley a 54 responsables de feminicidios no puede ser que después encuentren el camino porque un juez lo anda liberando”.
Finalmente, aseguró que él sí tiene un compromiso con las mujeres y porque se les haga justicia y no reparará cuando un juez pretende liberar a un violentador de las mujeres.