Habrá justicia para Rubén

el

Multihomicidio de la colonia Narvarte no quedará impune

 

El Universal

México, D.F.

 

En su cuenta de Twitter, el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, destacó que la muerte de cinco personas, entre ellas el periodista Rubén Espinosa Becerril, "es un hecho que nos indigna y no quedará impune. Agotaremos todas las líneas de investigación”, e informó que ha girado instrucciones a la Procuraduría General de Justicia capitalina (PGJDF) para encontrar a los responsables.

 

Cabe destacar quela PGJDF asegura contar con una testigo clave en el multihomicidio de la colonia Narvarte, ocurrido el viernes. En tanto,la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) expresó su más firme condena ante el asesinato del fotoperiodista.

 

 

El organismo exhortó a las autoridades mexicanas a redoblar esfuerzos en la investigación del caso, tanto en el Distrito Federal como en el estado de Veracruz, hasta agotar todas las posibles líneas de investigación.

 

Asimismo, pidió que se sigan reforzando las políticas y la institucionalidad existente en materia de protección de periodistas y personas defensoras de derechos humanos en el país.

 

"Estadísticas oficiales de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) Veracruz, con 11 periodistas asesinados desde 2010, es la entidad federativa con mayor cantidad de homicidios y desapariciones de periodistas, junto con Chihuahua", indicó la ONU-DH a través de un comunicado.

 

Por su parte, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) también condenó el crimen e instó a las autoridades a esclarecerlo y deslindar responsabilidades, para que no quede en la impunidad.

 

Rubén Espinosa Becerril fue asesinado el pasado viernes junto con la activista Nadia Vera y otras tres mujeres; colaboraba en varios medios de comunicación, incluyendo el semanario Proceso y la agencia Cuartoscuro, y era una voz reconocible en los llamados de justicia de otros colegas periodistas asesinados y desparecidos en Veracruz.

Su muerte, con un tiro de gracia en la cabeza, fue el desenlace de una serie de agresiones que sufrió en Veracruz, estado en el que trabajaba desde hacía ocho años y de donde se fue en junio tras denunciar amenazas y hostigamiento.

 

 

Los restos mortales de Rubén Espinosa fueron llevados a su última morada en el Panteón de Dolores, en medio del llanto de familiares, amigos y colegas que condenaron el crimen en el que el fotoperiodista perdió la vida junto con otras cuatro mujeres.