Formal prisión a asesino
*Daniel Pacheco Gutiérrez no tendrá derecho a libertad bajo caución
*Enfrentará proceso ordinario por los delitos de feminicidio, homicidio y robo
AGENCIAS
México, D.F.
Daniel Gutiérrez Pacheco, el único detenido por el multihomicidio de la colonia Narvarte, fue declarado formalmente preso, acusado por los delitos de feminicidio agravado, homicidio calificado y robo agravado en pandilla, derivado de los hechos ocurridos el pasado viernes 31 de julio.
Así lo determinó la jueza 25 penal, Hermelinda Silva Meléndez; por lo anterior, Gutiérrez Pacheco no tiene derecho a libertad bajo caución y enfrentará un proceso de tipo ordinario, por lo que pasarán más de seis meses para que se dicte una sentencia definitoria.
El detenido rindió su declaración preparatoria el pasado viernes 7 de agosto, solicitando la duplicidad del término, mismo que venció este día.
Daniel Gutiérrez fue detenido luego de una inspección ministerial en el departamento marcado con el número 401 de la calle Luz Saviñón, en la delegación Benito Juárez de la Ciudad de México, donde fueron masacrados el fotoperiodista Rubén Espinosa, la activista Nadia Vera, la maquillista Yesenia Quiroz, la colombiana Milé Virginia Martin y una empleada doméstica de nombre Alejandra Negrete.
En el lugar se encontró una huella dactilar que, al ser comparada en la base de datos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJ-DF), dio como resultado que se trataba de Gutiérrez Pacheco.
Éste declaró que los otros dos implicados se llaman José Abraham y Omar; añadió que José Abraham tiene entre 25 y 30 años, mide 1.70 de estatura, es de tez morena y cabello a rape tipo militar. Lo conoció hace ocho o nueve meses, cuando trabajaba como "viene, viene" en un establecimiento comercial entre Calzada del Hueso y Miramontes.
Al parecer, fue policía preventivo en el Distrito Federal y “estuvo detenido por un problema con unos detenidos", relató el acusado en su declaración;
Gutiérrez describió a su otro compañero como un hombre de complexión delgada y tez blanca, entre 20 y 25 años, que trabaja como malabarista en avenida Miramontes, al Sur de la Ciudad de México.
El inculpado enfrentó una condena por violación entre 2000 y 2005 y fue liberado, gracias a los beneficios procesales que le otorgó el Gobierno del Distrito Federal, entonces al mando del perredista Alejandro Encinas.