Lucha por las mujeres continúa: Raquel Bonilla
Aún hay que vencer paradigmas, afirma la legisladora
Poza Rica, Ver.- “Por las mujeres que estuvieron, y por quienes estamos hoy aquí, la lucha continúa todos los días”, aseguró la diputada federal Raquel Bonilla Herrera, quien aseguró que las mujeres siguen rompiendo paradigmas, esquemas, lineamientos estructurales que mantiene un sistema que aún es necesario vencer para generar mejores condiciones de igualdad entre las mujeres, lo anterior en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
“Nuestras acciones nos están definiendo cada vez, y gritamos cada vez más y más fuerte, rompiendo nuestros propios techos, creciendo cada vez más y pisando muy, muy firme”, señaló la legisladora al dar el arranque al Conversatorio organizado en el Marco del Día Internacional de la Mujer, con la participación de la especialista Paulina Elsa Zepeda García, denominado “!No me Felicites!”.
La legisladora para Poza Rica, Tihuatlán y Coatzintla, presentó a la ponente, Paulina Elsa Zepeda García, integrante del Frente Nacional de la Sororidad, Asesora del Congreso de la Ciudad de México, impulsora de derechos a favor de las mujeres, como la Ley Olimpia, y ha recibido reconocimientos por su labor a favor de la mujer, quien afirmó que la lucha por abatir la desigualdad de las mujeres, no ha cesado, pues recordó que la conmemoración surge a partir de hechos muy violentos en contra de las mujeres que hace años luchaban por tener derechos laborales, y que terminó en el incendio de la fábrica donde trabajaban, con ellas adentro, por lo que este origen no motiva a nada que celebrar, no es nada que nos convoque a felicitar a otras mujeres, cuando la fecha está teñida de sangre de muchas mujeres de por medio.
Manifestó que desafortunadamente aún en nuestra sociedad, las mujeres son educadas en varios procesos de socialización, en las escuelas, o las casas, en donde se generan desigualdades que muchas veces no se ven. La sociedad empieza a imponer muchas cosas, pues desde antes que nazcan empiezan a preguntar si el producto va a ser niña o niño, para saber qué van a regalar, y desde ahí se define el rosa para las niñas y el azul para los niños, que impone condiciones de estereotipos para las mujeres.