Localizan más restos humanos
* El Colectivo “Ayuda a regresar a Luis Alberto” busca entrar al predio La Galera, luego de que a través de una denuncia anónima les informaran sobre la presencia de restos humanos, informó Noemí Martínez Martagón, que busca a su hijo Luis Alberto desde hace 13 años
El Colectivo “Ayuda a regresar a Luis Alberto Calleja” de Poza Rica busca entrar al predio La Galera en el municipio de Tihuatlán luego de que a través de una denuncia anónima les informaran sobre la presencia de restos humanos en la zona, informó Noemí Martínez Martagón, que busca a su hijo Luis Alberto desde hace 13 años.
Señaló que este predio está cerca de La Gallera, otro punto de fosas clandestinas en donde se hallaron 40 mil restos humanos, y que mediante llamadas anónimas les han informado este nuevo sitio se trata de un “cementerio de fosas”.
“Estamos solicitando el ingreso porque a través de llamadas anónimas nos han dicho que es un cementerio, pero todavía no se ha conocido tanto, es un cementerio de fosas clandestinas. Es un espacio muy grande tipo La Gallera”.
Noemí Martínez afirmó que son las madres quienes buscan a sus hijos porque las autoridades como la Fiscalía General de Veracruz (FGE) y la Comisión Estatal de Búsqueda no lo hacen.
“Andamos con pico y pala buscando a nuestro hijos cuando debe ser la Fiscalía y Comisión de Búsqueda (…) Poza Rica es cuna de desaparecidos y no hemos tenido respuestas. Hay restos que no han sido identificados”.
Afirmó que Poza Rica es una ciudad muy peligrosa, y que actualmente bares están cerrados por las agresiones que se han registrado en las últimas semanas y que a ello se suman las desapariciones.
“A diario desaparece gente y la autoridad dicen que son disputas entre bandas pero no es verdad porque se meten con las familias”.
Afirmó que a pesar del cambio de gobiernos no hay avances en temas de búsqueda e identificación y eso aplica para todos los partidos políticos y sus representantes
“Todos son iguales, ya sea PRI, PAN, Morena o PRD, cuando andan en campaña prometan muchas cosas pero cuando llegan al poder no nos quieren recibir”.
Indicó que su hijo desapareció en Poza Rica el 18 de septiembre de 2010 a manos de Policías federales activos que fueron cooptados por la delincuencia organizada.
Dijo que se logró una sentencia de 37 años contra uno de los policías responsables pero su sentencia fue revocada por un magistrado de un Tribunal Colegiado de Boca del Rí.
“No quiero ser otra madre a quien maten porque nos están. Matando por buscar a nuestros hijos y las autoridades no nos dan protección ni nada”, alertó.