Francisco Garfias - “No está bien que al Presidente le vaya tan mal…”
Marcelo Ebrard no se va del PRD. Lo aseguran cercanos colaboradores del ex jefe de Gobierno del DF. Sabemos que ya se sentó en varias ocasiones con Carlos Navarrete, presidente de ese partido de izquierda, para negociar las condiciones de su permanencia.
No descarte verlo en la Cámara de Diputados como coordinador del grupo amarillo en la próxima legislatura, a la que también van los expresidentes de ese partido, Jesús Zambrano y Guadalupe Acosta Naranjo.
Con ellos dos —y con Miguel Mancera— habrá también que negociar para que le abran cancha a Marcelo como coordinador de la bancada en San Lázaro.
· La opción MC está descartada para Marcelo, nos aseguran. La idea de convertirse en cabeza de ratón no lo convence. Ebrard sigue siendo un activo, ya descontado el desgaste por la línea 12.
El partido que encabeza Dante, además, no anda en su mejor momento. La imagen de López Obrador ya no puede ser usada por el expartido naranja.
En su desesperación, Dante hizo alianza con el expanista Manuel Espino, con la esperanza de jalar el voto de azules inconformes con lo que ocurre en ese partido, pero no le alcanza para compensar la ausencia del líder de Morena.
Ebrard en el PRD es oxígeno puro para Los Chuchos. A ese partido le rompieron el alma cuando Nueva Izquierda apoyó a José Luis Abarca como candidato a la alcaldía de Iguala, a pesar de sus oscuros antecedentes. No está para lujos o caprichos de nadie.
Agregue la renuncia del emblemático Cuauhtémoc Cárdenas, que dejó a ese partido sin su llamado “líder moral”, y saque conclusiones de cómo Navarrete inició su gestión como presidente de ese amenazado partido.
· Ayer supimos, por cierto, que no habrá ningún tipo de alianza electoral PAN-PRD. Ricardo Anaya, jefe nacional de los azules, lo hizo público ayer en rueda de prensa.
Entre las “razones de fondo” que esgrimió es que el PAN no está de acuerdo con quienes se aliaron con el gobierno para subir los impuestos en una reforma fiscal que hunde al país. Una parte del PRD votó a favor.
Pero hay más de fondo. Fuentes vinculadas con el morenovallismo nos dicen que el amarillo se adelantó a esta decisión, pero no la hizo pública.
“Anaya sí tenía autorización para negociar alianzas, pero el Consejo Nacional del PRD ya las había rechazado. Iba a haber una nueva votación sobre el tema, pero Héctor Bautista, secretario general de ese partido, retiró a los de ADN y ya no hubo sesión”, nos cuentan.
En otras palabras: el gobierno federal operó con Bautista para reventar la coalición PAN-PRD, que en otros tiempos les dio fuertes dolores de cabeza en estados que controlaba el PRI: Sinaloa, Oaxaca, Puebla.
Bautista, es de todos sabido, fue un aliado de Enrique Peña, cuando éste gobernó el Estado de México. El líder de la corriente ADN, exsenador, excoordinador de los diputados locales en el Edomex, tiene cercanía con el equipo del actual Presidente de la República.
· Tampoco habrá alianza del PRI con el Panal. Los tricolores irán con sus aliados tradicionales del PVEM en las elecciones del 2015. El Consejo de Nueva Alianza confirmó la decisión en su sesión de ayer. Sólo respetarán las coaliciones a nivel local que ya tenían firmadas con el tricolor.
“La mano de Rafael Moreno Valle está detrás de todo”, nos aseguran.
· “¡La Virgen de Guadalupe nos hizo el milagro…!”, festejó, muy risueño y por adelantado, el senador perredista-marcelista Mario Delgado. Ya iba de salida en su camioneta cuando se detuvo sólo para hacernos el comentario de que la Reforma Política del DF sería aprobada este viernes por la Cámara alta.
La Ciudad de México tendría, por fin, autonomía, su congreso y su constitución propia. Los chilangos dejarían de ser “ciudadanos de segunda”.
Pero no contaba con que el PAN dificultaría el “milagro guadalupano” Los perredistas acusan a los azules de bloquear sistemáticamente la tan esperada Reforma. “No están de acuerdo con la forma en que se plantea la asamblea encargada de elaborar la constitución del DF”.
· “No está bien que al Presidente le vaya tan mal”, soltó, espontáneo, el perredista Víctor Hugo Romo, delegado en Miguel Hidalgo.
Hizo el comentario en el marco de una charla sobre la irrupción con una bandera mexicana manchada de sangre, en plena ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz a Malala, del joven Adán Cortés Salas, estudiante de la UNAM. La imagen le dio la vuelta al mundo y refuerza la convicción de que en México no se respetan los derechos humanos.
Romo nos dijo que hizo una encuesta en Miguel Hidalgo sobre el desempeño del presidente Peña. En esa delegación está la Residencia Oficial de Los Pinos, pero también la famosa Casa Blanca de La Gaviota. Sólo el 21% de los encuestados lo aprueba. “Ocho de cada diez lo reprueban”, subrayó.
· Veracruz es uno de los nueve estados donde habrá elecciones para gobernador en 2016, pero los aspirantes ya se mueven como si fueran en el 2015. Las encuestas van y vienen. Las precampañas disfrazadas también. En manos de este reportero cayó una realizada por la Universidad Veracruzana.
La citada encuesta dice que las preferencias electorales las encabeza el senador del PRI, Pepe Yunes Zorrilla. Entre nueve candidatos es el mejor ubicado. A la pregunta, ¿cuál de ellos sería un buen gobernador de Veracruz?, el 11.6% dio ese nombre.
Atrás vienen los panistas Miguel Ángel Yunes Linares, 8.6; y Miguel Ángel Yunes Márquez, 6.6 por ciento. Le sigue el priista Héctor Yunes Landa, 6.2 por ciento; Juan Bueno Torio, 5.3 por ciento; el panista Julen Rementería, 4.7 por ciento; el secretario de gobierno Érick Lagos (delfín del gobernador) 4.7 por ciento; y el perredista Elías Moreno Brizuela.
En los pasillos se menciona el nombre del expanista Gerardo Buganza, quien dejó ese partido por los malos tratos que recibió de Felipe Calderón.
Pero la respuesta que se llevó el más alto porcentaje fue “ninguno de ellos”: 46.6 por ciento.
En otras palabras, hay espacio para otros aspirantes.