Frentes Políticos 17/2/16
I. Honores. El papa a lo suyo. En Chiapas predominó su amor por los pobres. Se fundió en abrazos con los más pequeños, los indígenas. Y rezó en la tumba del obispo Samuel Ruiz García, quien se ocupó de acercar la Iglesia católica a los pueblos originales de esta tierra. Oró en su memoria. Francisco reivindicó la obra de Ruiz, ignorada y vilipendiada incluso dentro de la iglesia. Defendió a los pobres, luchó por el respeto a su dignidad y a su vida. El cardenal Javier Lozano Barragán, quien presume ser amigo de Francisco, cuando fue arzobispo de Zacatecas, pedía exterminar a los indígenas chiapanecos, alzados por la lucha de sus derechos en diciembre de 1993. Otro enemigo de Samuel Ruiz.
II. ¿Y la misericordia? Por un lado el discurso conmovedor del papa Francisco, y por el otro sus organizadores. Ante indígenas de todo el país, el papa llamó a todos a que hagan un acto de conciencia y aprendan a decir perdón a esos pueblos incomprendidos y excluidos de la sociedad, a los que algunos han considerado inferiores por sus valores, su cultura y sus tradiciones. El perdón que la historia debe a los oprimidos. Quienes se hacen sordos son los de su logística. En Chiapas, así como en Ecatepec, hicieron a los fieles pasar por durísimas condiciones climáticas. Un poquito de misericordia no vendría mal, eh, señores de la curia. Hoy en la agenda papal reunión clave: con los jóvenes en Morelia.
III. Les cae a los tramposos. La medida suena entre oportuna y oportunista. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente sancionó con 168 millones de pesos a Volkswagen México por la comercialización de 45 mil 494 vehículos sin haber obtenido el certificado de cumplimiento ambiental correspondiente. Embarrados están Audi, Bentley, Porsche, Seat y Volkswagen. Ya lo sabe, la misma trampa en el control de emisiones que se volvió para la VW escándalo internacional. Ya se habían tardado. Pero que nos digan a qué se va a destinar el dinero de esa multa. No se vaya a perder en el camino. Porque a estas alturas, entre tramposos te veas.
IV. Demasiado tarde. El gobierno de Nuevo León presumió darle otra cara al penal de Topo Chico mediante un operativo realizado. En redes sociales dio a conocer que se detectó la instalación hasta de un bar al interior, que era administrado por un grupo delictivo. Fueron retirados 280 puestos semifijos de alimentos y abarrotes, que eran operados por la red criminal directamente o a través del cobro de piso, ofertando productos con sobreprecios de hasta 120%. Drogas, armas, mujeres. Y qué tal que Jaime Rodríguez El Bronco, gobernador, lo hubiera hecho desde el primer día de su gestión. Seguramente hoy no habría 49 familias de luto. Imperdonable. Credibilidad: cero.
V. Cuestionamiento. La Fiscalía de Estados Unidos pide cadena perpetua para Alfredo Beltrán Leyva, El Mochomo, líder del narcotráfico juzgado en Washington por liderar una trama internacional destinada a introducir toneladas de droga a EU. Traficó cocaína, mariguana y metanfetaminas, y es acusado por el uso de armas y sobornos a funcionarios públicos. Le llegó la hora. Vale la pena preguntarse si en serio, después de lo ocurrido en Topo Chico, ¿hay todavía alguien que pida que Joaquín El Chapo Guzmán no sea extraditado? Urge llevárselo a una cárcel de verdad, donde se le quite lo único que le queda a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera: su poder. Inmenso hasta ahora.