Yuriria Sierra - Ahí viene El Peje

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La percepción ciudadana con respecto a los partidos políticos —todos, sin excepción— no puede ser peor. Ni modo. Los partidos lo saben, cada año se empeñan por convencer a nuevos electores de ser la mejor opción, aunque a últimas fechas sus esfuerzos son hacía su militancia ya lograda. Que no se vayan, que se queden, que ahora sí.

Y como si los partidos políticos que existían hasta hace un par de días no nos costaran lo suficiente, ahora hay tres nuevos. Los tres ya tenían tiempo haciendo su “luchita” para ser reconocidos por el ahora INE como grupos políticos hechos y derechos. El Partido Humanista, Encuentro Social y, claro, ¡Morena! Pero lo derecho no les duró mucho. Los dos primeros fueron acusados de inmediato: habrían dado algunos “gustitos” a sus simpatizantes con el fin de lograr el número requerido por el Instituto Nacional Electoral. A Encuentro Social, también lo acusan de haber recibido donativos de parte de organizaciones religiosas y de integrar a sus asambleas a ministros de culto. Que alguien les pase un memo en donde les digan que el Estado es laico. Ni 24 horas y ya les sacan trapitos. Eso sí es récord.

 

Claro que de estos tres nuevos partidos, el que destaca es del Andrés Manuel López Obrador. Nos damos por enterados de una vez que se lanzará por la presidencial en 2018, él ha dicho que “sólo si la gente quiere” y ya sabemos que él sabe siempre lo que la gente quiere. Campañota que se va a armar los próximos cuatro años. Desde hace un tiempo ha estado de gira, otra vez, por el territorio nacional, viajando con los donativos que recibía Morena cuando era una asociación civil. Ahora va a seguir viajando, pero con el donativo que todos le daremos a la fuerza, pues ya como partido político recibirá presupuesto para su operación. Ya hasta faltó a su palabra de no hacer giras internacionales y hace unos días él mismo publicaba en sus redes sociales que se encontraba en Europa, en el Vaticano. Pero, no pensemos mal, no se financió el viaje con el dinero de Morena, sino con el adelanto que le dieron por la publicación de su último libro. Seguramente, todos los movimientos que realice en un futuro y que puedan ser “sospechosos” los financiará con el mismo dinero, para que no pensemos mal. ¿Coartada perfecta?

De una vez hagamos cuentas: estos tres partidos nos costarán por cabeza 6.3 millones de pesos al mes. En total, para lo que resta del año, serán más de 50 millones de pesos lo que cada uno reciba. Y si a eso le sumamos lo que tienen asignados los partidos que ya existían, pues entonces nos equivocamos de profesión. Negociazo que resultan los partidos políticos que, muchas veces, funcionan para todo menos para lo que un partido es. Y es que muchos existen como “satélites” para agrupar votos y volverse una fuerza política que al momento de la elección se venden al mejor postor. Partidos pequeños que funcionan sólo en alianzas que les aseguran su permanencia.

Por lo pronto, ahí viene El Peje. Rebosante con su nuevo presupuesto y con la oportunidad que le están dando los partidos, especialmente el PRD con sus divisiones y múltiples conflictos internos, de figurar de nuevo en el escenario político. Y es que, ahí vienen también, las elecciones intermedias, la primera prueba para estos tres nuevos partidos.