Noqhla se mantiene en pausa

el

Édgar Escamilla

Poza Rica

 

Hasta el momento se desconoce el dictamen de la última sesión del Consejo de Arqueología del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), respecto al destino de la zona arqueológica de Noqhla, proyecto que podría consolidar la identidad cultural de los pozarricenses.

 

Al respecto, el arqueólogo encargado del proyecto, Hugo Juárez Tablero, reconoció el impulso que se la ha dado a esta zona a través del gobierno municipal, lo que ha permitido se dé mayor realce a la solicitud de apertura presentada ante el INAH, por lo que se dijo optimista de que se logre.

 

 

Noqhla es nombrada así por la directora del proyecto, la doctora Patricia Castillo y por el encargado del mismo, Hugo Juárez, luego de buscar elementos entre los vestigios para evitar un nombre más genérico como “Kilómetro 8.5”, como fue nombrado en un inicio hace ya más de año y medio, en base a su ubicación geográfica cercana a ese punto de la carretera hacia Papantla.

 

El sitio se ubica en la colonia Guadalupe Victoria, en el sector conocido como Halliburton; sin embargo, esto no bastaba para nombrar a la nueva zona arqueológica, por lo que en base a los hallazgos que dan cuenta de dos asentamientos étnicos distintos, se acordó que llevara el nombre de Noqhla.

 

Significa “Encuentro” en totonaco, pero se trata de una adaptación lingüística del vocablo original, a fin de hacerlo más accesible para la colectividad y que pudiera ser recordado con mayor facilidad.

 

El sitio da cuenta del asentamiento de una población totonaca en el periodo comprendido entre el año 800 al 1200 de nuestra era; contemporánea a la cultura Tajín. Cien años después, aparece otro asentamiento, ahora huaxteco, que perduró desde el 1300 a 1521.

 

Noqhla representa el encuentro entre estas dos culturas antagónicas, pero además se encuentra en una zona donde confluyen diferentes etnias por la vocación industrial de Poza Rica, generando un sincretismo que ahora se ve respaldado en un periodo milenario.

 

 

Mientras tanto, resta esperar el resolutivo del INAH a favor de la apertura de este nuevo sitio arqueológico, que servirá para fortalecer la identidad cultural de todo un pueblo.