Casas de empeño afilan sus garras
‘Cuesta de enero’ genera aumento de ingresos a negocios de préstamo
Por Isaac Carballo Paredes
Poza Rica
Debido a la volátil situación económica que vive el país y una anticipada ‘Cuesta de enero’, que marca el inicio de una de las temporada más complicadas financieramente hablando para la gran mayoría de los hogares mexicanos, casas de empeño de la ciudad se preparan para su mejor temporada del año.
Los efectos potenciales del incrementos de precios de alimentos, calzado, vestido y servicios por la devaluación del peso; agravados por la falta de planeación de un presupuesto familiar, dificultan la situación económica de miles de familias de Poza Rica y el país.
De acuerdo con estadísticas emitidas por casas de empeño como Montepío y Fundación Dondé, en los dos últimos años, durante los meses de diciembre y principios de enero, los niveles de recuperación de prendas rondan en 30 por ciento, notándose hasta la segunda quincena del mes de enero un repunte de 10 por ciento en préstamos.
Sin embargo, la verdadera ‘Cuesta de enero’ comienza en el mes de febrero, cuando los empeños se disparan entre un 15 y un 25 por ciento, según la región del país, que de acuerdo a estimaciones por la complicada dinámica nacional, se cree va a incrementarse hasta en un 35 por ciento.
Es por ello, que las casas de empeño dejan entrever en estas fechas el fácil acceso a bienes, servicios y gozar de distintos beneficios como plazos y tasas de interés de entre 2.5 y ocho por ciento, que el propio cliente elije de acuerdo a sus necesidades y capacidad de pago.
Al momento de decidir entre las opciones de préstamo prendario, se recomiendan aquellas que no persiguen fin de lucro y defienden la causa asistencial; lo cual asegura un plan de recuperación económica y el retorno de la prenda en garantía, manteniendo una cartera vencida de 20 por ciento, mientras las comerciales llegan a un 60 por ciento.
Cabe mencionar, que solo diez por ciento de las casas de empeño que existen en el país son de asistencia privada (IAP´s) lo que impacta en el bolsillo del pignorante, que al desconocerlas, adquiere un préstamo en condiciones de abuso, carentes de estándares de calidad en el servicio, seguridad y con tasas de interés muy elevadas.