Trampa mortal en Central Oriente

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“Desaparecen” tapadera de un registro en el cruce de dicha avenida y Central Norte

Siguen sin funcionar los semáforos

Édgar Escamilla

Poza Rica

Personas desconocidas retiraron ayer martes, la tapadera del registro que se encuentra justo en el cruce de la avenida Central Oriente con Central Norte; sin señalamiento preventivo alguno, el boquete de más de medio metro de diámetro, puso en riesgo la integridad de automovilistas y peatones, quienes deben ‘torear’ los vehículos a su paso, ante la falta de operación de los semáforos recientemente instalados.

Con la construcción del distribuidor vial, fue necesaria la reubicación de los semáforos en este crucero, sin que hasta la fecha la empresa encargada de los trabajos o la autoridad competente, hayan hecho algo para solucionarlo, no así los que se encuentran en el acceso a las instalaciones petroleras, a la altura del Departamento de Contraincendio, que ya operan para permitir el ingreso y la salida de los vehículos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus trabajadores.

 

El cruce de Central Norte y Central Oriente se ha convertido en una prueba de agilidad para los peatones, quienes primero deben sortear a los taxistas del municipio de Coatzintla que se han apoderado de la acera frente a la tienda departamental y frente al mercado Los Portales; después, deben esperar a que algún automovilista les ceda el paso, pues la mayoría imprime mayor velocidad para ganar el paso a los que intentan ingresar al primer cuadro de la ciudad.

Al intentar ganar el paso, varios automóviles y camionetas cayeron en el hueco del registro, sin que se registrara un accidente de mayores consecuencias. No fue sino hasta horas más tarde, que colocaron un señalamiento preventivo, para indicar el foso.

En ese mismo lugar son evidentes las omisiones de la empresa Sigma, encargada de la construcción del distribuidor vial. El pavimento se encuentra severamente dañado a causa de la obra y los automovilistas deben maniobrar para evitar caer en los baches.

 

También sobre la banqueta, en esa misma esquina, existe otro registro que es destapado recurrentemente por los trabajadores de la obra, lo que ha provocado que varias personas caigan en él.