Messi irá a juicio por fraude

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El juzgado de instrucción número 3 de Gavá desestimó ayer viernes íntegramente el recurso presentado por la defensa de Lionel Messi por tres delitos contra la Hacienda Pública. A partir de ahí, al jugador argentino solamente le queda recurrir ante la Audiencia de Barcelona para librarse del banquillo.

El juez Manuel Alcover admitió que Messi podía estar "al margen de la gestión económica, contractual y tributaria de los ingresos que generaba" pero el fallo dicta que "debe reiterarse, respecto a la denegación de estas diligencias, que para dictar la presente resolución basta con que existan indicios.

Lionel Andrés Messi Cuccittini ha podido conocer y consentir la conducta defraudatoria, incluso a título de dolo eventual, sin que sea necesario ni que tales indicios hayan sido plenamente acreditados ni que dicho conocimiento pueda haber abarcado todas las operaciones contables o societarias o la cuantía exacta de lo defraudado.

 

Es por ello que el juez sentencia: "Se desestima íntegramente el recurso de la reforma presentado por el Procurador de los Tribunales D. Rafael Ros Fernández, en representación de D. Lionel Andrés Messi Cuccitini, frente al Autor de fecha 28 de julio de 2014, por el que se acordó la continuación de las Diligencias Previas por los trámites del Procedimiento Abreviado, confirmándose dicha resolución en todos sus pronunciamientos".

Quiere esto decir que contrariamente a lo solicitado por el fiscal respecto a su apoyo al recurso presentado por Messi por entender que no existían indicios de la comisión de delito alguno por parte del crack, pidiendo "el sobreseimiento libre respecto de él", el abogado del estado se opuso, entendiendo que es una "opinión subjetiva" que Leo "estuviera al margen de la gestión económica, contractual y tributaria de los ingresos que generaba", por mucho que fuera su padre quien los gestionara.

El magistrado también rechazó la propuesta del futbolista de que declarasen como testigos Alfonso Nebot, Ángel Juárez, abogado y asesor de la familia Messi, y Raúl Sanllehí, director del Área de Gestión del club, por considerar que sus declaraciones "no resultan pertinentes". La finalidad de la defensa era acreditar "la nula intervención, participación y conocimiento" del futbolista respecto a la contratación, gestión societaria, administración de fondos y autoliquidación tributaria. Es decir, que de los negocios se encarga directamente su padre.

 

Una fuente cercana a la defensa del futbolista admitió a ESPN que la sentencia del juez fue recibida "con sorpresa" y si bien rechazó adelantar acontecimientos sí admitió que se estudiará a fondo el escrito. Existe la sensación de que Messi sufre una persecución en este caso, por cuanto en el último año se puso al corriente de sus obligaciones con la Hacienda Pública, habiendo pagado ya 53 millones de euros, admitiendo la existencia de culpa por desconocimiento y dando por hecho que se cerraría el caso.