Brenda Caballero - Nuevas formas de extorsión

Nuevas formas de extorsión

Brenda Caballero

Números Rojos

Llaman a la puerta del presidente del patronato para pavimentar cierta calle de la colonia Obrero Campesina. Al parecer, es un empleado del Ayuntamiento, eso dice mientras le comenta al vecino que vienen a ver lo de la calle, para que se pavimente, pues tiene conocimiento de que los colonos han metido varios escritos de solicitud.

Al presidente le da gusto saber que por fin pavimentarán esa calle que se pone muy fea cuando llueve. Por lo que de inmediato entabla conversación con él.

El empleado le comenta que necesitan dar seis mil pesos para empezar a comprar ciertos materiales, pues a pesar de que el Ayuntamiento de Xalapa pondrá la mayor parte, es necesario que los vecinos hagan una cooperación.

De inmediato, los vecinos convocaron a reunión y empezaron la colecta del dinero requerido. Después de hablar, solo lograron reunir la cantidad de tres mil pesos, por lo que el empleado del Ayuntamiento aceptó ir personalmente a comprar en la camioneta del presidente los primeros materiales.

Ambos personajes se pusieron en camino a la ferretería; sin embargo no bajaron juntos, puesto que el presidente iba a estacionar su vehículo, dejando al empleado del Ayuntamiento en el negocio.

Minutos después, el presidente del patronato de la calle a pavimentar llegaba a la Ferretería, pero el “supuesto empleado” había desaparecido con el dinero.

De inmediato se trasladaron al Ayuntamiento para hacer la denuncia; sin embargo, allí les aclararían que ellos no mandaron a ningún empleado a su calle.

II

Un amigo me dice que le llamaron a su celular diciéndole que por el buen manejo de su tarjeta de crédito y su pago puntual se ha hecho acreedor a un premio. Le informan que debe recogerlo en cierto hotel, por lo que le dicen que la cita es el día 27 del mes anterior a las siete de la noche. Por supuesto que aclaran que no le van a vender nada, ni está condicionado a dar nada a cambio, sólo le dan un folio para recibir el “supuesto regalo”.

Definitivamente mi amigo decide ir, puesto que le van a obsequiar “algo”. Al llegar al lobby del Hotel (que está cerca de la SEV) lo atiende una señorita que le pide su folio.

El se lo da y espera a que lo trasladen a un salón donde hay varios muchachos y edecanes.

Allí empiezan las preguntas: ¿Cómo se llama? ¿Dónde trabaja? ¿Cuánto gana? ¿Cuántas tarjetas de crédito tiene? Mientras contesta, un joven anota las respuestas. Paso siguiente, le piden su tarjeta de crédito; anotan el número y un chico se va y regresa con una Cortesía de Hospedaje para disfrutar tres días y dos noches en destinos como Cancún, Mazatlán, Los Cabos, Puerto Vallarta, Acapulco o Veracruz.

Al ver que el documento que le dan no tiene ningún logo del banco, le da cierta desconfianza y decide retirarse.

No conforme con eso, al otro día, acude al banco a preguntar sobre dicha promoción y sus movimientos. Por fortuna, mi amigo tenía su tarjeta sin vigencia. Además, le dicen que cuando la institución bancaria hace la promoción, se lo hacen saber directamente en la información anexa a su estado de cuenta.

Ahora, si buscamos en internet Dreams Luxury Travel SA de CV, encontraremos cómo dicha empresa te obliga a firmar un váucher por una cantidad muy alta por gozar durante 10 años de vacaciones con grandes descuentos.

Aquí hago un paréntesis puesto que hace como tres años, conocí a una persona que había sido estafada con este mismo modus operandi.

Actualmente, vivimos en una situación donde por todos lados buscan fregarnos, y usan muchas veces el nombre de instituciones o dependencias para lograr sus fines fraudulentos. A ello hay que agregar el hecho de de que juegan con los sentimientos, necesidades o deseos de las personas. Ojo, mucho ojo…

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