José Valencia - Por corrupción, municipios sin dinero

el

¡ADELANTE!

Por corrupción, municipios sin dinero

José Valencia Sánchez

El problema de la mayoría de los ayuntamientos es la carencia de dinero suficiente para obras y compromisos de campaña. Con tal de obtener el voto popular, los candidatos ofrecen lo imposible y cuando alcanzan el cargo, se encierran a piedra y lodo y para nada dan la cara.

 

En estas condiciones están casi todos los 212 alcaldes veracruzanos, quienes a partir de este periodo durarán cuatro años en el poder, para buena o mala suerte de sus respectivos municipios.

Lo peor es que quienes encontraron las arcas vacías, ya sea por ineptitud o corrupción de sus antecesores, se resisten a proceder legalmente contra los responsables. Lo correcto sería sancionar con cárcel a quienes desviaron recursos públicos y obligarlos a la reparación del daño patrimonial.

De lo contrario, se vuelven cómplices y defraudan la confianza de sus electores, que antes cada trienio y ahora cada cuatro años abrigan la esperanza de, ahora sí, escoger autoridades honorables y aptas.

Esta lenidad, negligencia y tolerancia sólo puede dar por resultado ayuntamientos quebrados e ineficientes por secula seculorum y un creciente hartazgo ciudadano, que debilita a la democracia.

La sociedad ve con incredulidad y desánimo cómo alcaldes van y alcaldes vienen y continúan los saqueos en los municipios sin que haya poder humano o político capaz de frenar esta voracidad que genera comaladas de políticos millonarios, mientras el pueblo se encuentra inmerso en la pobreza y sin los servicios públicos básicos.

Es urgente la llegada de servidores públicos impolutos, decentes, y preparados, decididos a erradicar la corrupción y a trabajar realmente por el bienestar de los ciudadanos.

Es inadmisible que sigamos viendo cómo tantos políticos cínicos se roban impunemente, una y otra vez, los dineros del pueblo y no hagamos nada por impedir estos latrocinios.

Nadie escarmienta en testa ajena, pero si encerráramos en prisión a unos cuantos exalcaldes y extesoreros, por peculado o desvío de fondos públicos y se les incautaran los bienes mal habidos, muchos de los ediles en funciones lo pensarían antes de meter mano al cajón de su municipio.

Veamos quién es el valiente y honesto alcalde que dice: ¡soy el primero en aplicar la justicia!