Caerán más cabezas en la FIFA
La fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, espera que se den a conocer más implicados en la investigación de corrupción que realizan actualmente en la FIFA. “Esperamos presentar cargos adicionales contra individuos y entidades”, explicó en una conferencia de prensa, celebrada en Zurich. Lynch declinó hacer comentarios cuando le preguntaron si el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, estaba siendo investigado.
Antes, el exconsejero anticorrupción de la FIFA, Mark Pieth, declaró que Blatter debería enfrentar una investigación criminal por ´vender a precio menor´ los derechos de la Copa del Mundo a Jack Warner. Lynch aseguró en Suiza que nadie está por encima de la Ley, al referirse a la investigación que realizan ´a fondo´ en las ´entrañas´ de la FIFA y que continuará hasta sus últimas consecuencias.
En una conferencia celebrada en un salón cercano al hotel ´Bauer au Lac´, donde la Policía suiza arrestó a siete oficiales de la FIFA, en mayo pasado, Lynch elogió el espíritu de colaboración que han establecido las autoridades suizas y estadounidenses en este caso.
“En Estados Unidos, esa investigación resultó en cargos que incluyen extorsión, fraude electrónico y lavado de dinero que abarcan dos décadas. Expuso (la investigación) a altos directivos de la FIFA, líderes regionales y otros cuerpos de gobierno bajo el resguardo de la FIFA, así como ejecutivos de ´marketing´ deportivo que, de acuerdo con los indicios, pagaron millones de dólares en sobornos para obtener derechos de televisión y ´marketing´ de torneos internacionales”.
Bajo lo que fue catalogado como el fraude del Mundial, 14 individuos, incluyendo a nueve ejecutivos o exejecutivos de la FIFA, fueron involucrados y actualmente enfrentan juicios. Cuatro de ellos se han declarado culpables. La comparecencia de Lynch junto a su contraparte suizo, Michael Lauber, se presenta mientras el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, forzado a renunciar por las revelaciones, ha sido ´arrastrado a la mira´ de los investigadores.
Nueva evidencia ha revelado que en 2005 firmó un acuerdo para vender los derechos de la Copa del Mundo al exdirectivo Jack Warner, por un precio mucho menor al del valor del mercado. Blatter ha insistido en que está “limpio” ante las acusaciones de corrupción: “Tengo mi conciencia y son un hombre honesto. Estoy limpio. No estoy preocupado”.