Encontronazo entre pipa y taxi

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-El conductor de la pesada unidad se dio a la fuga

Por MIGUEL ALBERTO CRUZ

Un taxista local fue impactado por una pipa que transportaba agua; tras el choque, el conductor de la pesada unidad emprendió la huida. El saldo de este aparatoso accidente dejó cuatro personas lesionadas; una de ellas perdió el conocimiento.

Los hechos se registraron en la calle Voladores, esquina con Juan Leal, cuando un vehículo de la marca Nissan, tipo Tiida, habilitado como taxi y marcado con el número económico 1158, fue impactado en el costado posterior izquierdo por una pipa que transportaba agua, la cual se dio a la fuga y más tarde fue encontrada abandonada en un campo de PEMEX, cerca de la colonia Manantiales.

Segundos después del impacto, al interior del taxi, Humberto Juárez García, de 21 años de edad, con domicilio en la calle Francisco Villa, sufrió un fuerte golpe en la cabeza que lo hizo perder el conocimiento, junto a él viajaban Teresa González Rivas, de 26 años, con domicilio en la calle Heriberto Jara Corona, de la colonia Luis Salas, quien iba acompañada por su hija Leslie Maite San Juan González, de 10 años de edad, y su cuñada Wendy Jazmín San Juan González, de 23, quien es comerciante ambulante.

El taxi terminó proyectado contra un puesto de pinos navideños, causando algunos daños y, además, provocó lesiones al comerciante Pedro Francisco Santos, de 32 años de edad, quien tiene su domicilio en la calle Cerrada de Juárez, de la colonia Manuel Ávila Camacho, de Huachinango, Puebla, quien presentaba dolor en cervicales y probable fractura de clavícula.

 

Al lugar arribaron los paramédicos de Protección Civil y un grupo voluntario, quienes trasladaron a los lesionados al hospital civil, ahí los médicos le negaron la atención al joven que permanecía inconsciente; un médico de guardia se limitó sólo a revisar superficialmente al lesionado y le dijo a los paramédicos que lo trasladaran a Poza Rica; sin embargo, ante la falta de un familiar que se hiciera responsable, el traslado se retrasó varios minutos, al grado de que el muchacho ya comenzaba a presentar convulsiones.