Investigan atentado

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-Días antes de la agresión, vecinos aseguran que un joven salió sangrando tras ser golpeado en esa casa

Por CARLOS SÁNCHEZ HERNÁNDEZ

A poco menos de 15 días, la familia del ingeniero baleado en el interior de su domicilio, protagonizó una riña donde un joven salió bañado en sangre; vecinos aseguran que tenían una fiesta y se detuvo por la visita de los familiares del lesionado, quienes llegaron a reclamar la golpiza.

La pasada madrugada del viernes, Esaú C. R., de 47 años de edad, y su esposa Aracely Y. M. Z., fueron baleados en el interior de su domicilio donde un sujeto logró penetrar la fortaleza sin hacer uso de violencia, por lo que la residencia fue asegurada por la Fiscalía General del Estado, mientras se llevan a cabo las pesquisas para dar con el responsable.

Mientras tanto, Aracely permanece internada en el hospital de zona de Petróleos Mexicanos, donde hasta el momento permanece es estado crítico.

Como se informó anteriormente, el ingeniero declaró ante las autoridades ministeriales que el ladrón disparó en una ocasión contra la dama, y en ese momento la detonación lo despertó y, al bajar a ver qué sucedía, se abalanzó contra el ladrón para intentar desarmarlo, pero éste activó nuevamente su arma y logró herirlo en una de sus extremidades, para después darse a la fuga.

Elementos de la Policía Ministerial que investigan el caso ya realizaron un recorrido por la residencia y, hasta el momento, no encuentran pista alguna que los lleve a dar con la forma en la que entró el agresor.

La residencia cuenta con bardas perimetrales de más de cinco metros de altura, en la cima tiene protecciones de herrería que hacen aún más difícil el acceso a la vivienda, las puertas son de acero con chapas de seguridad y el portón cuenta con sistema eléctrico para abrir y cerrar, además de cámaras de seguridad en el interior de la misma.

Estos portones sólo pueden ser abiertos de forma manual por la parte de adentro, y por fuera sólo con un control remoto que la empresa fabricante entrega a los propietarios con un código único para su seguridad; las bardas no tienen rastro alguno de que hayan sido escaladas, por lo que la tarea para la Policía Ministerial no es nada fácil.

 

Mientras tanto, el Fiscal encargado del caso continúa realizando diligencias para dar con él o los responsables del atentado al ingeniero de PEMEX, que hasta el momento continúa con la camioneta, propiedad de la federación, estacionada afuera de su domicilio.