Red de agua potable superó su vida útil
-Nueva tubería y traer el vital líquido del río Tecolutla, es la opción.
Por Édgar Escamilla
La ocurrencia de dos fracturas, con una semana de separación entre una y otra, en el ducto de agua que alimenta la planta potabilizadora de la Comisión del Agua del Estado de Veracruz (CAEV), puso en evidencia las malas condiciones de la red de agua de Poza Rica, por lo que sería necesario un programa para la renovación de la tubería y evitar con ello más problemas a los usuarios.
La ruptura del ducto de 30 pulgadas proveniente de la bocatoma de la CAEV, en la comunidad de Corralillos, Coatzintla, el fin de semana pasado, una semana después de que se presentara un percance similar a escasos metros, provocó el desabasto del líquido en sectores, de por sí, golpeados por la escasez del mismo.
Colonias del sector este de la ciudad, como Parcela 14, Petrolera, Revolución, entre otras, que están programadas para recibir el agua los fines de semana, fueron las principales afectadas; mientras tanto, el organismo operador de la CAEV en esta ciudad, tuvo que recurrir a la utilización de camiones cisterna para tratar de paliar la falta de agua.
Son empleadas seis pipas de 40 mil litros, además de otras con capacidad de 10 mil litros; un total de 16 camiones cisterna, en dos turnos, a fin de dotar del servicio a los usuarios, que se estima podría regularizarse a partir de este martes.
“No estamos exentos de que esto vuelva a suceder, ya en las oficinas centrales están enterados de las dos fugas”, comentó Edmundo Sosa López, titular de la CAEV Poza Rica, quien descartó que en el corto plazo pudiera darse una renovación de la infraestructura; sin embargo, reconoció la necesidad de que así sea.
Una segunda opción sería a la par, lograr la posibilidad de traer el agua que requiere la ciudad desde el río Tecolutla, para lo que se requeriría de una nueva tubería con especificaciones acordes a la cantidad de agua que estaría bombeándose.
Mientras tanto, se ocupan de mantener materiales en bodega para poder afrontar este tipo de fugas que dejan sin agua a gran parte de la población.
A la falta de agua, cuya demanda se acrecienta durante esta temporada en la que se registran las temperaturas más elevadas del año, se suman los constantes apagones por cortocircuitos en las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).