Anaya artífice de la derrota del PRI
-Y dicen que se aproxima “El Lobo”, pero aún no sabe por cuál partido, con eso de que ya estuvo en el PRD y el PRI
-Ex secretario de salud hipotecó la ciudad y ahora quiere volver a la presidencia o poner a un candidato a modo
Por Luis Oscar Rodríguez
Señalado de haber amasado una cuantiosa fortuna al amparo del poder municipal, ex alcalde, ex diputado y secretario de salud estatal, Pablo Anaya Rivera estaría detrás de las aspiraciones del empresario farmacéutico César Ulises Rivera Garza, quien por enésima ocasión busca ser presidente municipal de Poza Rica.
Con un slogan que se puede ver en todas las farmacias “París” de esta ciudad, Rivera Garza se auto-promociona: “Se aproxima el lobo a nuestra cueva”, espéralo, 2017; lo que no es más que un acto desesperado y adelantado de campaña, al que ya se han sumado algunos priístas, que al igual que Pablo Anaya, en el pasado proceso electoral apoyaron a la coalición PAN-PRD.
Anaya Rivera, quien se hiciera famoso en redes sociales y en medios de comunicación a nivel nacional con la frase “no es fácil comprarse una elección. Hay que comprar votos, hay que saber a quién comprárselos”, intentaría, dicen, buscar una vez más la alcaldía de esta ciudad o en su caso la nominación de César Ulises Rivera, con quien hizo grandes negocios con medicamentos, cuando uno era secretario de Salud y el otro diputado local.
Sin embargo, las cosas no las tiene tan fácil, debido a que entre las bases priístas saben que como presidente municipal Pablo Anaya Rivera, prácticamente, hipotecó la ciudad al firmar un contrato por 15 años con la empresa encargada de recolectar la basura de la ciudad; además de comprar a precio de oro las tierras donde hoy se ubica el Centro de Rehabilitación Infantil.
A eso, debe sumarse que en la pasada elección para gobernador, junto con sus operadores ya conocidos, negociaron apoyos a Pepe Kirsch para cerrarle el paso a Paty Berlín.
Por eso, incluso, hay quienes aseguran que en realidad César Ulises Rivera Garza es en realidad la segunda carta de Anaya, pues en caso de no lograr la candidatura, este sería impulsado desde otro partido, que bien podría ser el PAN, al grado de que incluso ya estarían en pláticas.
Esto no sería nada extraño, si se toma en cuenta la convicción partidista del “Ogro de las ofertas”, quien ya contendió por el PRD, fue mencionado como pre candidato en el partido Movimiento Ciudadano y luego diputado por el PRI, de ahí ir por el PAN o cualquier otro partido que le ‘abra las puertas’, sería lo de menos.