Naro Amador divide al PRD
-Traiciona a quienes le tendieron la mano en campaña dentro del PRD y se dice incondicional del gobernador electo
-Hace campaña adelantada en favor de su compadre Heberto Baños, pero por igual impulsa a su amigo Abelardo Aguirre
-Hace gestoría y presiona a alcaldes para beneficiar con obras a Enrique Macgregor, Constructora Maya y Alejandro Torres
Por Luis Oscar Rodríguez
Leonardo Amador Rodríguez, el flamante diputado federal por el Partido de la Revolución Democrática por el V Distrito, ha venido de más a menos, pues muchos de los que un día confiaron en él y lo impulsaron para incursionar en la política, hoy están arrepentidos y lejos de ser un factor de unidad dentro del PRD, se ha convertido en ‘una piedra en el zapato’ para alcaldes de la zona y la misma dirigencia estatal, que encabeza Rogelio Franco.
Fuentes cercanas al comité estatal perredista nos confirman que en el Congreso nacional más reciente, Naro Amador apoyó a una corriente contraria a de quienes, en su momento, lo invitaron a ser candidato y dentro del distrito son conocidas sus diferencias con actores políticos.
Envalentonado por su triunfo que, más que por méritos fue por las circunstancias actuales, sumado a que se dice amigo del gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, el legislador federal no ha perdido la oportunidad para animar a su compadre y socio Heberto Baños, para que le entre a ‘la grilla’, pues le ha prometido hacerlo candidato de la alianza PAN-PRD, al tiempo que, por igual, ‘le guiña el ojo’ a su amigo Abelardo Aguirre.
Sin embargo, sus acciones no han quedado ahí, pues si bien su gestoría ha fructificado bajando recursos, esto no solo se ha traducido en beneficios para algunos sectores, sino también para sus amigos Nicanor Martínez Olguín de la Constructora Maya; Enrique Macgregor de la compañía Magasa y Alejandro Torres, a quienes lo mismo ha “recomendado” en Tihuatlán, que Poza Rica y Coatzintla para la ejecución de obras.
Lo grave del caso es que estos empresarios de la construcción, amparados en la protección que les brinda el fuero del legislador Leonardo Amador, incumplen con tiempos en la ejecución de obras y, en algunos casos, hasta se ha puesto en duda la calidad de los trabajos que realizan.
Es así como viene trabajando el legislador perredista, quien si bien impulsa a sus propias cartas con miras a la presidencia municipal, se dice que su verdadero objetivo es ser él, quien se quede con la candidatura y para eso en comentarios dentro de su círculo más cercano ha llegado a mencionar que “Miguel Ángel”, como le llama al Gobernador electo, “quiere que sea yo”, pero sus aires de demócrata lo han hecho alentar falsas esperanzas en su amigo Heberto de quien señalan no gana ni en su casilla.