La comida ultraprocesada causa adicción, revela un nuevo estudio
Suelen ser alimentos ricos en carbohidratos refinados y grasas, dos componentes que inducen la misma activación de los circuitos neuronales de recompensa
Agencias
México
Un artículo publicado en 'The British Medical Journal' afirma que el 14% de los adultos y el 12% de los niños son adictos a los ultraprocesados, y a un nivel de adicción "sin precedentes" en los infantes. ¿Cómo podemos evitarlo? Se trata de un trabajo científico donde se recoge todo lo conocido hasta la fecha sobre el poder adictivo de los ultraprocesados y sus implicaciones a nivel clínico y social, y en el que se constata que su composición y presentación consiguen activar los circuitos neuronales de recompensa de forma similar a como lo hacen el alcohol o el tabaco.
Fernando Fernández-Aranda, uno de los expertos que participó en el análisis, explicó que los resultados demuestran que los menores mantienen una relación con la comida "descontrolada" e "inadecuada". Dijo que los ultraprocesados son todos aquellos productos que no son naturales, que pasan por un proceso de industrialización y entre los más consumidos están el pan, las galletas, las papas fritas o frutos secos con miel, con edulcorantes, con grasas, para hacerlos más sabrosos y apetecibles, entre otros.
¿Por qué es adictiva la comida ultraprocesada?
"Suelen ser alimentos ricos en carbohidratos refinados y grasas, dos componentes que inducen la misma activación de los circuitos neuronales de recompensa, con la liberación de dopamina en el cerebro, que la nicotina o el etanol. Esto hace que la adicción a ellos siga los mismos mecanismos fisiológicos de adicción que el alcohol o el tabaco, y puede asociarse con comportamientos compulsivos, con una calidad de vida más baja, o con una salud mental y física deficiente", precisó el experto.
Sostuvo que hay una serie de áreas a nivel cerebral que son más excitadas por sus sabores y olores. "Responde más a esos estímulos de refuerzo y de gratificación más o menos inmediata. Para ello, desde la industria recurren a la incorporación de azúcares, o de sabores adicionales muchas veces prefabricados, que estimulan más la apetencia por el producto, de manera que terminan comiéndose más", añadió.
Consideró que la adicción a los ultraprocesados es un tema "sensible", puesto que, a diferencia por ejemplo de las drogas que puedes dejar de tomarlas si eres adicto, en el caso de la alimentación de ultraprocesados es más difícil porque, en muchas ocasiones, debido a su bajo precio, es la única opción para familias con pocos recursos.
¿Cómo consumir menos ultraprocesados?
Aseguró que lo idóneo sería hacer más accesible en determinadas zonas los productos frescos, algo que también favorece el consumo de los ultraprocesados, productos a los que considera que podría ponérseles tasas o limitar su marketing también. "Hay aspectos relacionados con la concienciación, con la diseminación de esta información, de psicoeducación ante determinados tipos de edades, sobre todo en niños y en adolescentes, sobre el impacto del consumo de ultraprocesados en su salud que convendría poner en marcha", destacó.
Concluyó que también valdría poner en marcha de una serie de guías clínicas para el tratamiento y prevención de la adicción a este tipo de alimentos. Sostuvo que su impacto no sólo se ve en la infancia, sino también en las personas con trastornos de la conducta alimentaria.
Con información de Europa Press
Información tomada del Heraldo de México