El Solar Impulse bate su propio récord
REDACCIÓN
TOKIO
El avión Solar Impulse 2 se encontraba este miércoles casi a medio camino entre Japón y Hawai, tras más de dos días y dos noches de vuelo por encima del océano Pacífico.
Con más de 50 horas a bordo del aparato en solitario, el piloto André Borschberg ya realizó una hazaña inédita, aunque todavía debe permanecer casi 60 horas más en su cabina.
"Es la primera vez que iniciamos un tercer día de vuelo sin interrupción, con un nuevo ciclo de recarga de baterías solares", se felicitó Bertrand Piccard, el otro piloto de la aeronave.
"Este momento fascinante muestra que un avión puede volar sin interrupción, produciendo su propia energía", añadió.
Por su parte, André Borschberg indicó que se encontraba "en excelente forma". También, "la noche ha sido difícil, pero fantástica", indicó este piloto de 62 años.
A las 08:00 de Tokio (23:00 GMT del martes), el piloto había recorrido tres mil 700 kilómetros desde su despegue de Nagoya (centro de Japón) el lunes. Actualmente volaba a una altitud de tres mil 300 metros.
"André realiza un salto a lo desconocido. Hasta este vuelo, en caso de problemas, podíamos decidir aterrizar en el aeropuerto más cercano, pero ahora el avión se encuentra en medio de la nada, por encima del océano, sin ningún lugar donde aterrizar", insistió Piccard.
El próximo desafío de la aeronave es atravesar próximamente un frente frío en su travesía oceánica de siete mil 900 kilómetros.
La aeronave salió el 9 de marzo de Abu Dabi para dar una vuelta al mundo de 35 mil kilómetros, una aventura destinada a promover el uso de las energías renovables, en particular la energía solar.