
La mexicana, María González se impuso ayer domingo con autoridad y se alzó con el Oro en la marcha de mujeres de los Juegos Panamericanos, con un nuevo récord continental, pero terminó tan deshidratada que fue llevada al hospital. En una mañana soleada y de fuerte humedad, González cruzó la meta de la prueba de 20 kilómetros en una hora con 29 minutos y 24 segundos, una nueva marca Panamericana.
La brasileña, Erica De Sena, llegó segunda, a 38 segundos para asegurar la plata, mientras que la ecuatoriana, Paola Pérez, entró tercera, a 2.28 para el bronce. La mañana estuvo con un 90% de humedad. Tras cruzar la meta, González, evidentemente exhausta, pasó a la camilla de atención...