
Conmociona al estado de San Luis Potosí el caso de una niña que fue declarada muerta y estaba viva, de que sus familiares se percataran en pleno velorio que el cristal de la caja se empañó y la menor movía los ojos, en su interior. Se trata de Camila Martínez, de 3 años de edad, quien tras padecer una diarrea aguda fue declarada muerta dos veces por personal del Hospital Básico Comunitario del municipio de Salinas. Su mamá, identificada como Mary Jane Mendoza, de 20 años, acusa negligencia médica, luego...